martes, 3 de diciembre de 2013

Merengue


Merengue

El Merengue  es un baile folklórico originario en República dominicana se ha difundido por toda América Latina teniendo gran aceptación, actualmente es un icono de nuestra cultura y es considerado como el baile nacional del país que le dio origen.
El origen de este baile es muy discutido ya que según Flérida de Nolasco fue Alfonseca quien lo invento. Pero para Rafael Vidal este baile “Nació con carácter de melodía criolla tras la batalla Talanquera donde triunfaron los dominicanos”.
“Pero en verdad el merengue nació influenciado de una música cubana llamada UPA, este género paso a Puerto Rico, de ahí se trasladaría a Santo Domingo a mediados del siglo pasado”, Frandique Lizardo.
Todos estos testimonios son de bailarines expertos e iconos y gestores de este ritmo. En 1844 el merengue aún no era popular, pero ya en 1850 se puso de moda, desplazando a la Tumba. A partir de ese momento tuvo muchos detractores.
Don Emilio Rodríquez Demorizi dice: "Los orígenes del merengue siguen pues, en la niebla. No parece que pueda atribuirse a origen haitiano. De haber tenido esa oscura procedencia no habría gozado de boga alguna en 1855, época de cruentas luchas contra Haití; ni los que en ese año repudiaban al merengue habrían dejado de señalar tal procedencia como suficiente motivo. Tampoco lo señaló Ulises Francisco Espaillat en sus escritos contra el merengue en 1875".
En realidad, poco se sabe en concreto acerca del origen del merengue. A mediados del siglo pasado, de 1838 a 1849, un baile llamado URPA o UPA Habanera, se paseó por el Caribe llegando a Puerto Rico donde fue bien recibido. Este baile tenía un movimiento llamado merengue que al parecer es la forma que se escogió para designar el baile y llegó a nuestro país donde ni siquiera se mencionó en los primeros años. Posteriormente fue bien acogido y hasta el coronel Alfonseca escribió piezas de la nueva música con títulos muy populares como "¡Ay, Coco!", "El sancocho", "El que no tiene dos pesos no baila", y "Huye Marcos Rojas que te coje la pelota".
A pesar de su auge entre las masas populares, la clase alta no aceptó el merengue por mucho tiempo, por su vinculación con la música africana. Otra de las causas que pesaron sobre el repudio y ataques contra el merengue fueron los textos literarios que lo acompañan, generalmente subidos de tono. Otras danzas dominicanas de origen negro no fueron atacadas por su carácter de danzas rituales.  Estas características no iban de acuerdo con los requerimientos religiosos de la elite, porque se creía que esta danza era un tipo de ritual africano, por lo que fue prohibida en algunos sectores de este país, o en días y fechas específicas. En 1875 Ulises Francisco Espaillat inició una campaña contra el merengue que fue totalmente inútil pues ya el baile se había adueñado del Cibao donde se hizo fuerte a tal punto que se asocia hoy esta región como cuna del merengue.
A principios del presente siglo músicos cultos hicieron una gran campaña para la introducción de esta danza en los salones.
A pesar de esta gran difusión y propaganda no se aceptó de pleno el merengue en lo que se llamaba "la buena sociedad dominicana" hasta que en una familia de la "aristocracia" de Santiago, en ocasión de la celebración de una fiesta solicitaron a Luis alberti, que iba a amenizar con su orquesta, que compusiera un merengue con "letras decentes", y éste accedió. Compuso para tal ocasión el "Compadre Pedro Juan", el cual no solo gustó, sino que causó furor, llegando a convertirse en el himno de los merengues. A partir de ese momento comenzó a diseminarse el merengue. Para esto la radio prestó una ayuda generosa.
Al diseminarse el merengue por todo el ámbito nacional, produjo, como toda manifestación cultural, variantes. Estas reflejan el manejo de los elementos culturales hecho al acomodo y conveniencia de algunos.
Existen  dos formas de merengue bien diferenciadas entre sí. El merengue folklórico auténtico que aún se encuentra en los campos, y el merengue de salón. Este último es el que más se difunde y el que la gran mayoría de personas creen que es folklórico. El merengue de salón fue el tipo más aceptado por América latina y el cual hizo este baile muy popular en la misma región, hasta en la actualidad, por lo que es infaltable en festejos latinos y muy popular en concursos de baile alrededor del mundo.
Referencias:


Tambora y Guira (2002) “ Historia del Merengue” recuperado el 21 de diciembre del 2012 desde: http://www.mindspring.com/~adiascar/musica/merhst-s.h